Tecnoticias

Descubrí el mundo de la inmobiliaria digital con Tecnoprop.

Fideicomisos en Argentina: Un Camino para el Desarrollo Inmobiliario con Oportunidades y Desafíos

Los fideicomisos se han consolidado como una herramienta fundamental para el desarrollo inmobiliario en Argentina, especialmente en lo que refiere a la creación de countries y barrios cerrados.

Esta estructura legal permite que inversores, emprendedores y propietarios se unan para llevar adelante grandes proyectos, aportando capital o terrenos que son administrados por un fiduciario de manera independiente y transparente.

En términos simples, un fideicomiso es un contrato en el que una persona (fiduciante) le transfiere bienes a otra persona o empresa (fiduciario) para que los administre por un tiempo o hasta cumplir con ciertos objetivos. Al final de ese tiempo o al cumplir con la condición pactada, los bienes son transferidos al beneficiario del fideicomiso, que puede ser el mismo fiduciante o un tercero. Esta estructura ha resultado particularmente atractiva en el sector inmobiliario por sus ventajas legales y contables, ya que el patrimonio del fideicomiso es independiente de las deudas personales de los involucrados.

Razones del Éxito y el Atractivo de los Fideicomisos

Una de las mayores razones del éxito de los fideicomisos en Argentina es su capacidad para limitar riesgos. Los bienes aportados al fideicomiso solo responden por las deudas generadas en el proyecto mismo, lo que significa que las obligaciones personales de los inversores no afectan al desarrollo, y viceversa. Además, los proyectos de fideicomiso no impactan directamente en los balances contables de los fiduciantes ni del fiduciario, ofreciendo una estructura clara y ordenada para gestionar los desafíos financieros que pueden surgir en un desarrollo inmobiliario de gran escala.

Desde un punto de vista estratégico, los fideicomisos han sido una solución ideal para el crecimiento de las periferias de las grandes ciudades. Factores como la contaminación, la sobrepoblación, el tráfico y la falta de espacios verdes han impulsado a muchas personas a buscar una vida más tranquila en countries y barrios cerrados. En estos desarrollos, los residentes pueden disfrutar de la naturaleza, la práctica de deportes al aire libre, mayor seguridad y una vida comunitaria que ofrece beneficios tanto funcionales como sociales.

Los Tiempos en el Desarrollo de Countries

Los fideicomisos para el desarrollo de countries en Argentina suelen tener un horizonte temporal de entre 6 y 10 años. Este período abarca diversas etapas que van desde la compra de tierras, el diseño del proyecto, la construcción de infraestructura básica (como calles, redes de servicios públicos y áreas comunes) y, finalmente, la escrituración de los lotes. Sin embargo, las demoras en las habilitaciones municipales, los permisos de obra y las aprobaciones legales pueden extender significativamente estos plazos.

Existen varios casos en los que el fideicomiso ha durado más de lo esperado debido a problemas externos. Por ejemplo, el caso del desarrollo de Nordelta en Tigre, Buenos Aires, enfrentó retrasos considerables por la complejidad del proyecto y la necesidad de cumplir con estrictas normativas ambientales y urbanísticas. En otros proyectos, como Pilar del Este o desarrollos en Córdoba, los propietarios han tenido que esperar hasta 12 o 15 años para obtener las escrituras debido a problemas burocráticos.

¿Por qué estas demoras pueden ser una oportunidad?

Si bien los retrasos pueden parecer una señal de alarma para muchos inversores, también pueden representar una oportunidad única para aquellos dispuestos a mirar más allá de los tiempos iniciales. En muchos casos, el hecho de que un fideicomiso esté trabajando activamente en superar las barreras burocráticas y que continúe recibiendo inversiones es una señal de que el proyecto tiene solidez y respaldo. La infraestructura ya desarrollada, el capital invertido y la visión a largo plazo de estos proyectos pueden convertirlos en una excelente opción para inversores que busquen una apuesta con potencial de revalorización.

Además, los proyectos que superan estas dificultades suelen tener un valor añadido: una vez que los trámites legales y las habilitaciones están finalizados, los countries o barrios cerrados suelen incrementar su valor de manera considerable, generando un retorno significativo para quienes tuvieron la paciencia y el capital necesario para esperar. La inversión en terrenos en countries que aún están en desarrollo puede ser especialmente atractiva, ya que el valor tiende a subir una vez que se completan las etapas de escrituración y urbanización.

¿Por Qué Vivir en las Afueras?

El auge de los barrios cerrados y countries no es casualidad. Cada vez más familias y personas buscan alejarse de los problemas propios de las grandes ciudades. La contaminación, la falta de seguridad y el constante tráfico son solo algunos de los factores que empujan a la gente a preferir una vida más tranquila y conectada con la naturaleza. Vivir en un country permite disfrutar de espacios verdes amplios, la posibilidad de hacer deportes al aire libre, y una comunidad más reducida y segura.

Pero no es solo cuestión de calidad de vida. También hay un componente de status social que impulsa a muchos a buscar un hogar en las afueras. Los barrios cerrados ofrecen un estilo de vida que combina lujo y tranquilidad, lo que los convierte en un imán para quienes buscan un lugar exclusivo para vivir o invertir.

Los fideicomisos inmobiliarios han sido y continúan siendo una de las estructuras más efectivas para el desarrollo de countries y barrios cerrados en Argentina. Aunque los tiempos pueden extenderse más de lo previsto debido a causas externas como habilitaciones y permisos, muchos de estos proyectos se mantienen sólidos y representan una excelente oportunidad de inversión.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.